Aquí estamos de nuevo en la cocina, con el octavo número. Le
hemos cogido el gustillo a endulzaros la vida y, por eso, os traemos un nuevo
postre. En esta ocasión vamos a realizar una receta típica de la fiesta de
Halloween, que será la semana próxima.
PASTEL DE CALABAZA
El pastel de calabaza es un postre típico de Estados Unidos,
que se prepara tradicionalmente en otoño, coincidiendo con la festividad de Halloween, también conocida como “Noche
de Brujas” o “Noche de Difuntos”. Como todos sabemos, en esta fiesta es típico
encontrar calabazas talladas a mano (Jack-o’lantern)
con formas de caras distintas y debido a ello, se aprovecha la pulpa de este
vegetal para preparar pasteles en estas fechas.
Existen diversas variedades de pastel de calabaza: de base
de masa quebrada con flan de calabaza, tipo cheesecake,
similar a bizcocho, etc. Todas ellas, tienen en común la calabaza, el azúcar,
la canela, el jengibre y la nuez moscada como ingredientes, variando el resto.
En Devicio, nos ha gustado mucho la receta que expondremos a
continuación, ya que es muy fácil a la vez que rica. El resultado final sería
similar a una “quesada” de calabaza.
¿Qué ingredientes vamos a necesitar?
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Para la masa
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300 g de harina
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120 g de azúcar moreno
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1 cucharadita de jengibre molido
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1 cucharadita de canela molida
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¼ cucharadita de nuez moscada
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Ralladura de medio limón y media naranja
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1 cucharadita de levadura química
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1 taza de leche de avena o cualquier leche
vegetal templada
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350g de calabaza cocida
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½ taza de aceite de girasol
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1 sobre de gasificante para repostería
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Para el frosting
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200 g de azúcar glass
§
La ralladura de un limón (sólo la parte
amarilla)
§
1 cucharada sopera de zumo de limón
¿Cómo se hace?
Vamos a precalentar el horno a 200ºC con calor arriba y
abajo mientras hacemos la masa. La base del pastel la vamos a realizar en una
batidora de vaso, mezclando de la siguiente manera:
- Batiremos la harina, el azúcar, el jengibre, la canela, las ralladuras de naranja y limón junto con la levadura química. Es decir, todos los ingredientes secos menos el gasificante.
- Acto seguido, agregamos la leche de avena junto con la calabaza cocida y batimos hasta conseguir una mezcla homogénea.
- Añadimos el aceite de girasol y batimos unos segundos.
- Por último, vamos a agregar el gasificante, que vendrá en un sobre dividido en dos partes. Batimos hasta integrar el gasificante en la mezcla.
- En este punto, que ya tendremos lista la masa, colocaremos un poco de margarina en un molde para que no se pegue nuestro pastel. Vertemos la masa en el molde y lo llevamos directo al horno, que bajaremos a 180ºC y dejaremos cocinarse sin abrir el horno durante unos 45 minutos aproximadamente (vigilándolo para ver que no se quema).
- Cuando nos parezca que el pastel se ha horneado lo necesario, pincharemos en el centro con un palillo para comprobar que no ha quedado crudo por dentro. Si llegados a este punto sale limpio, dejaremos enfriar el pastel. Si no es así, dejaremos unos minutos más en el horno y repetiremos el procedimiento.
En el caso de no tener batidora de vaso, se puede realizar
manualmente habiendo pasado primero la calabaza por la batidora o habiendo
hecho un buen puré con un tenedor. En este caso, los pasos serían los mismos.
Para realizar el frosting,
o crema para colocar sobre la tarta, vamos a mezclar el azúcar glass junto con la ralladura de limón
(este proceso se puede realizar manualmente con unas varillas o con el vaso de
la batidora). Después mezclaremos con la margarina a temperatura ambiente y,
por último, agregaremos el zumo de limón, obteniendo una crema bastante
consistente. En este punto, extenderemos nuestra rica crema sobre la base del
pastel y dejaremos reposar en la nevera durante, al menos, 4 horas.
Pastel de calabaza |
Celebréis Halloween o no, os animamos a probar esta dulce
receta ya que nos saca de los típicos postres a los que estamos acostumbrados y
nos deleita con una mezcla de especias y cítricos.
@SusanaMing
sma.devicio@gmail.com
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