Otra semana más estamos en Devicio, ¡ya con el décimo número! Ha pasado el puente y todavía
nos falta un mes para el de diciembre y un poquito más para las fiestas de
Navidad. Para hacer más llevadera la espera, y porque le hemos cogido el
gustillo a eso de los dulces, ahí va una receta de toda la vida transformada a
nuestro gusto.
ARROZ CON LECHE (DE
ARROZ)
El arroz con leche es una de esas recetas tradicionales que
todos recordamos de nuestra infancia. Ya fuera hecho por nuestras madres, tías,
abuelas, siempre sabía a gloria. Todos distintos, pero siempre exquisitos con
su dulzor, el sabor a limón de fondo y la intensidad de la canela.
El arroz con leche es un plato que se prepara como postre en
multitud de países. Dependiendo de la localización geográfica se añaden, además
del arroz y la leche, pasas, azafrán, agua de rosas, cardamomo, leche
condensada, etc. Existen ingente cantidad de recetas y todas divinas. Nos
centraremos en el arroz con leche típico de la zona Norte de España.
Para realizar este postre hay gente que cuece el arroz
directamente en la leche y aquellos que cuecen primero el arroz con agua. A
nosotros nos parece más sencillo con el paso del agua, ya que es menos probable
que se nos acabe pegando, gastamos menos leche y el resultado es igual de cremoso.
¿Qué ingredientes vamos a necesitar?
- 1 taza de arroz redondo
- 2 tazas de agua
- 4 tazas de leche de arroz caliente
- ½ taza de azúcar
- Una pizca de sal
- La cáscara de un limón bien lavado (sólo la parte amarilla)
- La cáscara de ¼ de naranja
- Dos ramas de canela
- Canela en polvo para decorar
¿Cómo se hace?
1. Se
pone a hervir el agua con la sal. Cuando hierva, agregaremos el arroz.
Dejaremos cocer el arroz durante unos 10-15 minutos, removiendo constantemente.
2. Antes
de que se quede sin líquidos, agregaremos
la leche de arroz ya caliente con el azúcar, la cáscara de naranja y
limón y los palitos de canela.
3. Dejaremos
cocinar (sin dejar de remover) durante, al menos otros 15 minutos, de tal forma
que el arroz quede tierno y bastante cremoso. Hemos de decir que al enfriar
espesa mucho, con lo cual es preferible dejarlo un poco caldoso a priori porque
podríamos correr el riesgo de que quedara una masa compacta.
4. Dejaremos
enfriar a temperatura ambiente en un recipiente grande, cuencos o vasitos
pequeños de nuestra elección, que posteriormente pasaremos a la nevera para que
termine de enfriar un mínimo de dos horas. En este paso podemos espolvorear canela
en polvo sobre la parte superior para decorar o para aportar mayor intensidad
de aromas y sabor.
Es un postre muy nutritivo que pueden tomar personas
celíacas, intolerantes a la lactosa o que no consuman lácteos. Queda muy, muy
cremoso y es sencillo (aunque en cuestión de arroces hay que cogerle el punto).
Deseamos de corazón que lo disfrutéis con moderación. La semana que viene os
traeremos más recetas, hasta entonces, disfrutad.
@SusanaMing
sma.devicio@gmail.com
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